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Contenido de la nueva p
Los poetas…
Tengo prisa, Mucha Prisa!
CAMINO SIEMPRE
CON PASOS LENTOS
PARA QUE LLEGUES
RAPIDO A TU DESTINO
Julargo.
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Apenas anoche, le cantaba a la vida
y, hoy al amanecer, cabizbajo medito.
como si estuviese implorando
pidiendo a Dios tan solo un momento
para ordenar mis últimos pasos a la vida.
Tengo prisa, mucha prisa, no lo niego.
Pero, ¿hasta donde mediré mis pasos?
cuando anoche mismo soñaba despierto
al compas del reloj que mide y nò el tiempo,
ni la prisa que urge al final de mi destino.
En la almohada de mis ilusiones
hago el balance de la vida
como si fuese testamento escribo
a los que serán mis herederos
del infortunio que les lego.
Con el legado de la vida,
referencia doy del pasado
del amor sincero y traicionero
pero que fueron fruto deseado
que vigoriza el corazón enamorado.
JULIO ARCHILA GOMEZ
ABRIL 2I DE 2008 áginaLos poetas
La Mujer y el Amor!
Por las veredas de la amargura
caminé buscando mi propio destino,
tropezaba con agudas espinas
lacerando mis pies en largo transito
Escuchaba voces de los pájaros
entonando “paso al caminante,”
buscando va, calmar su dolor
triste y llorando, el errante..
Me cobijo bajo las sombras de un árbol
de sus hojas vertían gotas de agua.
Se igualaban con lágrimas de mis ojos para esparcirse sobre la árida tierra.
En el alba de alegre y triste amanecer,
alzo mis ojos e imploro a mi Dios
mitigue mi desesperanza que me hace estremecer
y, convierta, en mi, la vida en un mito.
He llegado, por fin, a la meta.
Es la meta de mi negro destino
Ahora en paz mi alma descanza
¡No mas torturas!., no mas dolor,
Es el eterno sueño de los humanos
Es el sueño en donde no tiene precio.
Es el sueño de una nueva vida,
Es el sueño eterno de la igualdad
en, donde, todos, somos iguales
JULIO ARCHILA GOMEZ.
23 de Mayo de 2008
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DAME UN POCO DE TIEMPO! Apenas ayer cuando de mis labios se dibujó una leve sonrisa. recibo la fatal notificación del final de mi destino, . "Preparate porque mañana vengo por ti, el tiempo, está ya por finalizar" Asi. es,. tam solo 60 minutos entre la vida y la muerte separan lo que para mi fue amargura, dolor, hambre y miseria. Un Dios como el de la alturas levantó y dió ánimos , me dio fuerzas para luchar contra la adversidad. volver a vivir la vida que Dios me la obsequió. Son 60 minutos de vida que me quedan. Es un tiempo largo como una eternidad. Tiempo suficiente para rehacer lo perdido. 60 minutos de vida que hay que aprovecharlo. Son sesenta minutos de toda una vida para vivirla como si fuesen sesenta largos años. Vale la pena aprovechar el tiemo que nos queda, es tiempo de enmendar errores. APROVECHA 60 MINUTOS DE TU VIDA no la desperdicies. Quiérete y respetate a ti mismo. Pensamiento escrito el 25 de Noviembre de 1974 ------------------------------ AMIGOS..La verdad es que todo ser humano tiene algo de poeta. En el año de 1970 en los momentos mas triste de mi vida, cuando la nostalgia me dolía me hizo soñar y soñar para estar muerto soñando. Yo en esos tiempos era mi vida vagabunda, hambriento de necesidad, sin abrigo ni esperanzas. Solo me acompañama mi desesperación. Abandonado a mi suerte sin el calor franternal. En fin solo en la vida. Allí nació esta poesía dedicada para los que sufren. . Perdón!
A Dios a la vida y al amor!
Estoy presente ante el alto tribunal de Dios,
he abandonado el mundo de los mortales,
ha llegado el momento de rendir cuentas al creador.
Apenas ayer cuando de mi cuerpo se desprendía a lo que
nosotros llamamos espíritu, escuchaba voces y llantos de
quienes más de una vez me habían demostrado su amor.
Oía la opacada voz del sacerdote orando porque Dios
perdonara mis pecados. Al lado del representante de las
leyes divinas, observaba la presencia de mis seres queridos
llorando ante lo inevitable.
Eran segundos quizá una eternidad mi agonía,
sentía mis ojos húmedos y, de mis labios quise
dibujar una sonrisa y, de mi boca lanzar un grito
que me ahogaba en el silencio de la nada.
Todo era silencio a mi alrededor.
Mi voz estaba apagada al igual que mi corazón.
imploraba y pedía al creador,
me dejara hablar tan solo una palabra
que me diera luz a lo que para mi fue tinieblas.
De pronto, cesó el dolor que torturaba mi carne,
me envolvió una paz que nunca jamás sentí
cuando entre placeres y vino creí encontrar.
Dios me había dado una oportunidad más
para exclamar de lo mas profundo de mi ser,
la única palabra que habría salvar mi alma del pecado.
¡Por fin!, exclamé un grito como cuando nace un niño
saliendo de las entrañas de su madre. Yo en cambio, grité en
silencio, mi última palabra, PERDON.
Ahora muerto soy y, comparezco ante el tribunal de Dios
para encontrar el perdón y la paz de mi alma torturada en esta vida
llena de mentiras y de bajas pasiones.
JULIO ARCHILA GOMEZ
Marzo 27 de 1970
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